
Pues se veía venir. Era inaguantable que una empresa electrónica se quedará estancada en cuanto a la calidad y tecnología de sus productos y sumado a eso sus precios exorbitantes que lo sacaban de un mercado inventado solo por ellos.
Lo cierto es que RadioShack se acogió a la protección de la bancarrota y venderá más de 2.400 tiendas, tras registrar años de pérdidas y haber bajado en bolsa sus acciones un 99 % desde 2010.
La Comisión del Mercado de Valores (SEC) ya había suspendido con tiempo su cotización en bolsa de la compañía y hoy se hizo oficial la petición de acogerse a la bancarrota en un tribunal de Wilmington (Delaware).
RadioShack, una empresa creada hace 94 años, tenía en la actualidad activos de 1.200 millones y unas deudas de 1.300.
Tal parece que ya tiene varios compradores en la mira, para empezar a vender sus 4.000 establecimientos a través de dos de sus mayores accionistas, Sprint y General Wireless.
En tanto RadioShack aguarda a que el tribunal estudie y le aprueben su caso. Sprint anunció hoy en un comunicado que existe un principio de acuerdo para la expansión de su marca al tomar aproximadamente 1.750 de las tiendas.
Entonces todo hace suponer que ahora RadioShack será Sprint, y podrá hacer uso de la infraestructura de las tiendas de la que fuera la más importante de las cadenas de venta de electrónica.
Dice uno de los consejeros de Sprint «Hemos comprobado que nuestros productos y nuevas ofertas llevan a clientes a las tiendas, y este acuerdo permitirá a Sprint crecer como marca de distribución de manera rápida y a buen coste en locales muy bien situados», «Sprint y RadioShack esperan beneficiarse de las eficiencias operacionales y del márketing cruzado entre sus respectivos clientes».
Bueno si las empresas no aceptan la tecnología digital y no se innovan más temprano que tarde terminarán como RadioShack cerrando sus tiendas.