
Jaén es una hermosa ciudad y por ello sorprende a quienes la detallan, debido a que por desgracia este rincón andaluz pasa desapercibido sin razón alguna. Se encuentra colmada de historia, con un patrimonio muy rico y bellezas a donde quiera que vaya, además su gente es puro amor. A continuación se mencionan algunas de las razones por las cuales no la olvidará.
Castillo de Santa Catalina: se encuentra en lo alto del cerro del mismo nombre. La edificación fue parte de una red fortificada que hizo de su medina medieval la mejor defendida. No olvide ver su plaza de armas y la Torre del Homenaje; un paisaje maravilloso es poder contemplar el castillo iluminado tan pronto cae la noche. Al lado del castillo también está el Parador de Jaén, desde el cual tendrá vistas sorprendentes de toda la ciudad y sus alrededores.
Catedral de Jaén: se topará con este enorme templo en la Plaza Santa María. Al verlo comprenderá el porqué es considerado como uno de los mayores referentes españoles del renacimiento. Su fachada exterior es imponente y con numerosos detalles del estilo renacentista, y el interior es impecable en cada detalle que revela.
Palacio de Villadompardo: se localiza en el corazón del casco antiguo de la ciudad, actualmente alberga al Museo de Artes y Costumbres de Jaén, sin embargo, ha llegado a tener diferentes usos, incluyendo el de convento; en ese entonces, se le anexó una capilla de bellos acabados, siendo el punto más delicado la cúpula de la Asunción.
Refugio Antiaéreo de Santiago: en el año 1937 se construyeron varios refugios a raíz de un bombardeo muy fuerte, y una vez superada la guerra fueron cerrados. Hace un tiempo se abrió al público uno de ellos para que tanto su población como los turistas comprendieran de manera directa lo que ocurría en la época de la guerra civil.
Iglesia de la Magdalena: es la más antigua de la ciudad y se construyó sobre una antigua mezquita, de esta última solo quedó el alminar y el estanque central para las abluciones (ritual de purificación antes de orar). Durante la visita no olvide comprar los dulces de las monjas, sería imperdonable perderse esa oportunidad de probar algo casi celestial, sobre todo el más típico y curioso, la torta de aceite con azúcar.
No se angustie por los contratiempos; parece ser algo normal antes de cada viaje que surja algo inesperado. Si se trata de un accidente vehicular del cual su coche no se librará no se desanime, existen empresas que los compran, tanto, que la venta de coches siniestrados se ha hecho común. Vía online puede conseguir gran cantidad de desguaces y salir bien de tal suceso para retomar sus planes.